Pepe y su mascota

Pepe y su mascota

Català

 Cancion Pepe

¡Hola! Os voy a contar una historia que seguro que os va a gustar. Una historia sobre Pepe y su mascota.Pepe siempre había querido tener una mascota de compañía en casa, pero su mamá pensaba que no era la suficientemente responsable como para cuidar de ella. Pepe era un niño muy travieso y ella pensaba que si le regalaba una mascota no sería capaz de cuidarla adecuadamente.

El día de su cumpleaños celebraron una gran fiesta. Fue muy bonita y llena de regalos, pero el regalo que Pepe más deseaba, ese día no llegó. No hubo mascota.

Pepe se puso muy triste y subió a su habitación a llorar. Su Mamá subió a consolarle y lentamente le dijo al oído:

- Pepe, sé que tú quieres una mascota, pero no es posible. Todavía eres muy pequeño para encargarte adecuadamente de los cuidados que un animal de compañía requiere, pero he pensado en hacerte una propuesta.  Mañana temprano iremos al zoo y allí podrás disfrutar de la compañía de todos los animales del centro.

Pepe corrió emocionado de un lado a otro de la habitación, y dijo gritando y riendo:


-¡Por fin podré ver y estar un ratito con todos los animales del zoo!. Les haré muchas fotos y las colgaré en mi habitación, así parecerá que realmente tengo no una, si no muchas mascotas en casa. ¡Muchas gracias mamá.!
Al día siguiente Pepe y sus padres salieron de casa temprano y se dirigieron al zoo.

Pepe recorrió emocionado todas las instalaciones del parque mientras iba fotografiando a los caballos, a los ponis, a los cervatillos, a los gorilas y chimpancés y también a los delfines…Todos ellos estaban en su ambiente natural y se veían muy bien cuidados.

Llegaron a la zona de las piscinas donde estaban los delfines, las ballenas y las focas.
 
Allí les recibió emocionado el encargado del zoo, Pedro, que era un amigo de su padre.

Con él recorrieron todo el interior de las salas acuáticas. Pepe puedo ver de cerca a las ballenas y delfines. Pudo tocarlos, bañarse con ellos y darles de comer pescados.

Cuando llegaron a la zona de las focas, Pepe se dio cuenta que había una pequeña cría de foca en un rincón y prácticamente sin moverse.

Se acercó a Pedro y le preguntó porque aquella pequeña foca no se movía.

Pedro le explicó que desde pequeñita se había mostrado distante y triste. No participaba en los juegos como las otras focas y además prácticamente no comía

Pepe sintió una gran pena. Se acercó a ella y le acarició lentamente su pequeña cabecita.
La  foca de repente abrió sus ojitos y le miró.

-        ¡Vaya! – dijo Pedro- Es la primera vez que se deja acariciar por alguien. Debes ser muy especial para ella- dijo esbozando una gran sonrisa.

-        ¡Mira, mamá! ¡Has visto como se acerca a mí y busca mi manita!. Vendré todos los días a visitarla  igual de esta manera se recupera y logra estar contenta y feliz como las otras focas.Cada día la mamá de Pepe le acompañaba al Zoo a ver a la pequeña foca. Hasta le pusieron un nombre. Pepe decidió ponerle Littlemar ya que era muy pequeña y de color del mar.

Poco a poco la pequeña foquita fue perdiendo el miedo y se acercaba a los demás niños sin tanto temor. También participaba en los juegos con las pelotas y aros que los entrenadores les mostraban. Como recompensa a los esfuerzos siempre les ofrecían pescado fresco por lo bien que habían realizado el espectáculo. Pero Littlemar seguía sin probar bocado.

 En casa Pepe había colgado muchas fotos de Littlemar en su habitación y las contemplaba preguntándose porque ella comía tan poco.  Él sabía que ella no era como las demás foquitas, era muy especial.

Pensando y pensando en cómo podía ayudarla, a Pepe se le ocurrió algo.

-       ¡ Mamá, mamá¡- dijo dirigiéndose a su madre. Creo que tengo la solución al problema de Littlemar. Posiblemente al igual que a mí no me gustan los macarrones a ella no le guste el pescado- dijo esbozando una gran sonrisa.

-        Pero Pepe, Littlemar es una foca y a todas las focas les gusta el pescado- contestó su madre.

-        Pero podemos intentar darle otra cosa, igual ella es diferente a las demás focas y tiene otros gustos y preferencias- dijo exaltado Pepe.

 

Al día siguiente Pepe se dirigió al zoo con una cesta llena de diferentes alimentos: manzanas, naranjas, plátanos, coliflores, tomates…Le daría a probar todos y cada uno de los alimentos a Littlemar para comprobar cuáles eran sus preferencias.

Corrió enseguida en busca de la foca y acompañado con los diferentes entrenadores, le fueron ofreciendo una variada alimentación.

En ese momento todos saltaron de alegría muy pero que muy contentos. Littlemar estaba emocionada probando todos los alimentos y se mostraba contenta y feliz.

 

-       ¡ Por fin¡- dijo Pepe. Hemos descubierto que a Littlemar le gusta todo tipo de alimentos.

-        Si, posiblemente estaba cansada de comer solo el pescado que nosotros le íbamos ofreciendo- dijo el entrenador todo emocionado.

De esta manera descubrieron al fin que la pequeña foca prefería una alimentación variada ya que estaba cansada de comer siempre pescado.


Pepe estaba muy contento por haber conseguido descubrir el problema de Littlemar pero estaba también un poco triste porque ahora ya no irían tanto al zoo a verla.
En ese momento entró su mamá a la habitación:

-        Mira Pepe, como me has demostrado que puedes ser un niño muy responsable ya que has sabido cuidar y proteger de manera adecuada a Littlemar, papá y yo hemos decidido hacerte un regalo

-        ¡Ah  sí! ¿Qué es? – preguntó Pepe emocionado.

-        ¡Mira!

En ese momento el papá de Pepe abrió la puerta y detrás de ella apareció una nueva mascota.

-        ¡Papa, mamá es un perrito recién nacido!!  ¡Muchas, muchísimas gracias ¡!! - exclamó Pepe. Es el mejor regalo que me podías haber hecho.

Pepe corrió emocionado y fue al encuentro del pequeño perrito.

-        ¡Es  precioso! – gritaba emocionado Pepe.

-        Tiene unas manchitas blancas circulares en la piel. Le llamaré Spot.

Y de esta manera y gracias al esfuerzo y dedicación que Pepe había demostrado tener con Littlemar consiguió poder disfrutar de la compañía de Spot todos y cada uno de sus días.

Y colorín, colorado…este cuento se ha acabado.

Mónica Zambrano. Los Wikicuentos Multiculturales.

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